¿Por qué beber una copa de vino al día se dice que es bueno para la salud?
Beber una copa de vino al día: efectos en la circulación Según vatios estudios, una copia de vino al día contribuye a la prevención de varias enfermedades cardiovasculares. También está aconsejado en personas que tienen diversas dolencias. Entre ellas la diabetes o la osteoporosis. El vino, al ser un vasodilatador suave, puede paliar, aunque ligeramente, los daños que ocasiona el tabaco en los vasos sanguíneos. Además, interviene en la producción de colesterol, rebajando la del colesterol LDL (malo) y aumentando la de HDL (bueno). También tiene propiedades que evitan la formación de coágulos y trombos en la sangre. Esto se debe a que rebaja los niveles de una proteína que, cuando está presente en el organismo en niveles altos, puede ocasionarlos. Otro de los beneficios del vino sobre el organismo es la protección de los vasos sanguíneos. Por tanto, puede paliar la degeneración de las arterias producto de la edad, y funcionar como barrera frente a la arteriosclerosis. Un consumo moderado de vino (beber una copa de vino al día) también sirve para controlar la tensión arterial. Hay que tener especial cuidado con la cantidad de vino que se consume, eso sí. Pasarse puede causar el efecto contrario al deseado y contribuir a subir la tensión. Otros beneficios de beber una copa de vino al día Tomar una copa de vino diaria puede también rebajar el riesgo de padecer cálculos renales. Y también servir como mecanismo para el freno del Alzheimer, gracias a una de las sustancias que incluye. Hablamos del resveratrol, un compuesto que se encuentra en el vino tinto. Esta sustancia tiene un efecto protector de las neuronas y ayuda a mantenerlas en forma. Pero estos son sólo algunos de los beneficios que tiene beber una copa de vino al día. Además, el vino, consumido con moderación, tiene efectos beneficiosos en la piel, y facilita al organismo la absorción de determinados elementos de los alimentos. Entre ellos, las proteínas. También es un digestivo suave. También tiene un ligero efecto antihistamínico, por lo que los que sufren de alergia encontrarán un pequeño alivio en sus síntomas al consumir una copa de vino.